El problema...

Y es que sería capaz de bajarte la Luna si me la pidieras, sin importar lo que pasara después. Porque te amo, y a diferencia de la gente en general, para mi eso es lo más importante.

"El problema no es cambiarte, el problema es que no quiero..."

Limón y sal...

Tengo que confesar que a veces
no me gusta tu forma de ser
luego te me desapareces y no entiendo muy bien por qué
no dices nada romántico cuando llega el atardecer te pones de un humor extraño con cada luna llena al mes.

Pero a a todo lo demás le gana lo bueno que me das sólo tenerte cerca siento que vuelvo a empezar.

Yo te quiero con limón y sal, yo te quiero tal y como estás,
no hace falta cambiarte nada,
yo te quiero si vienes o si vas,
si subes y bajas y
no estás seguro de lo que sientes.

Tengo que confesarte ahora
nunca creí en la felicidad
a veces algo se le parece, pero
es pura casualidad.

Luego me vengo a encontrar con tus ojos y me dan algo más
solo tenerte cerca siento
que vuelvo a empezar.

Yo te quiero con limón y sal, yo te quiero tal y como estás,
no hace falta cambiarte nada,
yo te quiero si vienes o si vas,
si subes y bajas y
no estás seguro de lo que sientes.

Solo tenerte cerca
siento que vuelvo a empezar....

No-name

Acostada en mi cama pensando,
tratando de recuperar a la gente que alguna vez tuve a mi lado,
tratando de tomarme las cosas de un modo menos complejo,
tratando de entrar en sus vidas,
intentando comprenderlas,
mentes poco claras; palabras al viento:
memoria a corto plazo, locura temporal y frases sin terminar...

Cada una tiene algo,
algo que me intriga,
que me hace cometer errores;
mentes que me confunden, imágenes borrosas:
final poco claro y amor recíproco,
tentaciones y palabras de amor perdidas en nuestra conciencia,
mirándote de lejos y deseando tus labios solo por codicia,
solo porque me tientas con tus palabras y con tus suaves miradas dirigidas a ella, aunque quiero creer que son para mi.

Dulce y amargo al mismo tiempo,
elecciones absurdas y promesas de amor.

Mi pecho está abierto y algo falta dentro,
la sangre corre por mi cuerpo...
Sin anestesia me extirparon el corazón.

Sintiendo...

Puedo sentir el fuego de tus labios
ardiendo en mi interior,
siento tu sofocada voz
susurrándome en el oído
que con caricias,
derrita el hielo
que a simple vista
te tiene envuelta,
y con gusto lo hago,
hasta no poder más,
hasta que cerramos nuestros ojos,
y nuestras manos descansan entrelazadas,
aun sudando,
aun amándonos en el silencio de nuestra oscuridad.

Cuando despierto no estas,
las sabanas aun mojadas de nuestro sudor
ahora están frías.
Ya no hay nada que hacer,
cuando quieras volver a saciarte me llamas.